Comparativa cepillos eléctricos Oral B

Desde pequeña me he preocupado mucho por la limpieza bucal y he sido muy consciente de la importancia de lavarse los dientes tras cada comida. Tenía mucho miedo a los dentistas y sabía que si cuidaba mi boca podía mantenerlos alejados (salvo las correspondientes revisiones bucales) así que mis padres no tenían que insistirme para que cogiera mi cepillo de dientes. Esta preocupación por la higiene bucal he seguido manteniéndola y suelo cepillar mis dientes cuatro veces al día que es el número de ocasiones en el que como algo: desayuno, comida, merienda y cena.



Tuve mi primer cepillo de dientes eléctrico cuando era una adolescente. Al tiempo tuve otro y éste es el tercero que entra en casa. Todos han sido de la misma marca Oral B de Braun. El cepillo anterior era de la gama Professional care y éste es el modelo Vitality que es de una gama inferior. La principal diferencia en cuanto al cepillado entre ambos es que el modelo Pro realiza una limpieza 3D (oscila + rota + pulsa o vibra) y el Vitality 2D (oscila + rota). Asimismo según tengo entendido la cantidad de oscilaciones y rotaciones por minuto también es diferente en cada modelo. En este post me gustaría además de darte mi opinión, ayudarte a decidir si comprar un modelo básico o Pro.




Mis cepillos eléctricos anteriores han acabado rompiéndose por la batería. No es que se hayan roto como tal sino que la batería les ha empezado a fallar y no daba tiempo ni a cepillarse una vez seguida los dientes pese a haber tenido el cepillo cargando hasta justo antes del momento del cepillado. Que yo sepa no hay diferencias en cuanto a batería entre los distintos modelos de Oral B así que dado que ha sido la razón de tener que tirar más de uno, he optado por escoger uno más económico esta vez.

En cuanto a la limpieza, los cepillos de dientes eléctricos prometen eliminar más placa que un cepillo manual normal. Eso es difícil para mí de evaluar pero lo que sí puedo decir es que se nota la superficie de los dientes más limpia, como más lisita, es decir, realizan una limpieza más en profundidad. Respecto a si noto diferencia en este sentido entre Oral B Professional y Oral B Vitality, lo cierto es que no mucha. Hay que tener en cuenta que no he podido usar ambos cepillos el mismo día para realizar una comparación más exhaustiva porque el antiguo lo tiré por lo que sólo puedo valerme de mi recuerdo.

El uso que yo le doy al cepillo eléctrico es ocasional: a diario uso el cepillo manual y 5-6 veces a la semana cojo el eléctrico para realizar una limpieza más profunda.



Dentro de la caja de Oral B Vitality venía el mango del cepillo recargable, un cabezal y un cargador. Los cabezales son intercambiables así que pueden usar un mismo cepillo eléctrico varias personas. Una de las cosas que echo en falta y que sí tenía el cepillo Pro es una base de carga con espacio para guardar los cabezales. Tengo la suerte de que mi cepillo antiguo venía con una práctica funda de plástico para viaje. No me llevo el cepillo eléctrico cuando viajo pero me viene perfecta porque en este estuche hay espacio para guardar los cabezales.

Y hablando de cabezales, la marca tiene muchos tipos disponibles:

• CrossAction: con filamentos cruzados para una limpieza más precisa
• FlossAction: con filamentos Micropulse que penetran en profundidad entre los dientes
• 3D White: con copa pulidora de goma para eliminar con suavidad las manchas y blanquear los dientes
• TriZone: con forma alargada y triple acción
• Sensitive: para encías sensibles
• Precision Clean: el cabezal más vendido
• Essentials Kit: set de tres cabezales específicos (púa interdental, limpiador lingual y Power tip)

Junto al cepillo viene el cabezal CrossAction. Los recambios vienen con arandelas de colores para poner en la base y así distinguir de quién es cada uno.

Oral B Vitality cuenta con un temporizador y realiza una vibración para avisar que han pasado los 2 minutos de cepillado recomendado por dentistas. Los modelos Pro vibran cada 30 segundos para avisar de que debes cambiar a otra zona de la boca distinta. Además algunos de ellos cuentan con una pantalla adicional en el que hay un temporizador que además muestra si estás ejerciendo mucha presión o no. Mi anterior cepillo tenía la pantalla Smartguide pero reconozco que la usé un par de veces al principio y luego quedó relegada al fondo del cajón así que no es algo que sea muy útil para mí.

El precio del modelo Vitality Cross Action ronda los 20-25€ mientras que los modelos profesionales cuestan más de 45€.



En resumen y dado que no noto una diferencia abismal entre la capacidad de limpieza de modelos estándar y pro, me quedo con el estándar ya que lo único que echo en falta es la base de carga con el espacio para guardar los cabezales y ese problema ahora mismo lo tengo resuelto.