Testeando mascarilla Volcano y Té Matcha de Garnier

Cuando vi estas dos mascarillas faciales de Garnier me llamaron mucho la atención: Volcano prometía ser una mascarilla con efecto calor muy curiosa y la combinación de Té Matcha y Caolín sonaba bien para mi tipo de piel. Ambas son de la gama Skin Active de Garnier y a diferencia de las que he visto últimamente por tienda de esta marca tipo la Hydra bomb no son mascarillas en tejido o tela sino que son "monodosis" que se aplican sobre la piel.



El envase es un plástico pequeño que contiene 8 ml y que pese a su formato monodosis da para más de un uso e incluso yo diría que de dos dependiendo de la cantidad que se aplique. Yo suelo cerrar este tipo de mascarillas con una pinza y guardarlas para seguir utilizándolas las semanas sucesivas.



Comienzo por la mascarilla minimizadora de poros o Volcano mask. Esta mascarilla de Garnier combina arcilla roja con piedra volcánica. En su composición el segundo ingrediente es el caolín y en la parte superior de la lista aparece también la montmorillonita que es un mineral. La perlita (vidrio volcánico) aparece en la segunda mitad del listado junto al ácido láctico o al salicílico. No contiene parabenos.


Se debe aplicar sobre el rostro limpio y seco evitando contorno de ojos y labios. Se deja reposar durante 3 minutos y luego se aclara. Al aplicársela tiene un efecto calor: es una sensación suave y para nada molesta. No llega a endurecerse sino que se mantiene fluida sobre el rostro el poco tiempo que hay que dejarla actuar.

Promete minimizar los poros aunque es complicado conseguirlo con una única aplicación. La piel se ve con una textura más lisa y unificada.



La mascarilla facial con caolín para pieles mixtas y grasas o Purificante se basa en la combinación de Té matcha y caolín así que también es un cosmético con base de arcilla. El caolín vuelve a ser el segundo ingrediente por detrás en este caso del agua siendo el primero la glicerina en la mascarilla volcano. Curiosamente lleva también almidón de maíz, imagino que justificado por su capacidad de absorción con la intención de "chupar" la grasa de la piel. Camellia sinensis, que es la planta del té, aparece más o menos en la mitad de la lista. Además tiene en común con la anterior que lleva ácido salicílico y tampoco contiene parabenos.

Se aplica de la misma manera pero en este caso se deja actuar más tiempo: aproximadamente 10 minutos. A diferencia de la anterior, esta mascarilla se endurece conforme pasan los minutos. Para retirarla sólo hay que aclararla con agua.

Tras su uso la piel se nota más suave y matificada, en definitiva, más bonita.



Si tengo que comparar ambas mascarillas creo que me quedo con la purificante con té pues hice la prueba de ponérmela en una mitad del rostro y en la otra la volcánica y en la primera mitad notaba el rostro con una textura más lisa y uniforme sobre todo al tacto. Respecto a los poros no aprecié una diferencia significativa entre ambas, imagino que sólo un uso no puede hacer maravillas.

Estas mascarillas faciales de Garnier cuestan entre 1,50 y 2€ y en mi opinión merece la pena probarlas. Hay más de la misma línea para otros tipos de pieles como la de miel que es para pieles muy secas por si tú no tienes la piel grasa o mixta como la mía.